Isidre Gavín explicó que Cimalsa es una empresa pública organizada como mercantil, por lo que no recibe ningún tipo de ingreso de la Generalitat de Catalunya. Esta circunstancia ha hecho que Cimalsa haya buscado “alianzas con empresas privadas y en desarrollar proyectos público-privados”.
Por lo que respeta a los resultados de la empresa, el director general de Cimalsa señaló que a lo largo de los últimos cinco años se ha trabajado para “reducir la deuda de la empresa y aumentar los ingresos, que actualmente están en torno a los seis millones de euros”.
La actividad de Cimalsa se centra en promocionar, desarrollar y gestionar infraestructuras logísticas, como las CIM y los LOGIS y, dentro de estos últimos, destacan los LOGIS Intermodales. La gestión se lleva a cabo bajo un modelo público-privado, pactando y consensuando con las empresas privadas instaladas el nivel de servicios que se precisan. Además, Cimalsa también gestiona el aeropuerto de Lleida-Alguaire, una terminal ferroviaria de Vilamalla y una serie de aparcamientos para vehículos pesados.
Isidre Gavín indicó que para atender las previsiones de crecimiento en el transporte intermodal de mercancías, Cimalsa diseñó y empezó a desarrollar “tres grandes centros intermodales, los LOGIS Empordà, Penedès y Montblanc, cuya función es complementar unos puertos, como los de Barcelona y Tarragona que son enclaves muy urbanos y que tienen unas áreas logísticas en su entorno pero que no tienen una gran disponibilidad de metros cuadrados a su alrededor. Por ello estos centros intermodales, conectados a los puertos por ferrocarril y carretera, sirven para crear sinergias con los puertos”.
También destacó que algunos de los centros de Cimalsa ya están ocupados al cien por cien, como es el caso del CIM Vallès, el CIM La Seva y el LOGIS Bages, motivo por el cual, y debido al crecimiento de la demanda, se decidió relanzar un gran proyecto planificado desde los años noventa que es la segunda CIM metropolitana y que se desarrollará en las inmediaciones de la factoría de Seat en Martorell en un área de unas 140 hectáreas.
Por otro lado, Cimalsa también está desarrollando la terminal de Vilamalla que “tiene un gran potencial” y para el que se están buscando soluciones basadas en la colaboración público-privada. En esta infraestructura intermodal está interesada la industria del automóvil para mover producto multicliente (vehículo terminado, de segunda mano y componentes) desde la Península Ibérica hacia el centro de Europa.
Además, según Isidre Gavín, “también hay otras empresas de otros sectores muy interesadas en implantarse en este centro intermodal o bien utilizar su terminal ferroviaria, y diseñar a través de aquí unas cadenas logísticas innovadoras para hacer llegar sus productos a Europa”. Pero para que todo ello arranque es imprescindible resolver dos aspectos de la infraestructura: por un lado, conectar la terminal en ancho UIC a la vía general y, por otro, alargar el apartadero ferroviario de los 500 metros actuales de longitud hasta los 750 metros; y ambas cosas las tiene que hacer Adif, pero de momento están por hacer a pesar que se requiere una inversión de tan sólo unos 3,6 millones de euros. Al final, y según dijo Isidre Gavín, “por agotamiento y para que no se pierda el proyecto, lo acabaremos haciendo nosotros”, y añadió que “hemos hecho un proyecto europeo y un plan piloto de un tren multicliente Catalunya-Europa que es rentable. A la que tengamos un tren en marcha, la demanda se disparará”.
