El martes 13 de septiembre, Josep Maria Fortuny, subdirector general de Ordenación del Transporte y Desarrollo Sectorial de la Dirección General de Transportes y Movilidad de la Generalitat de Catalunya, fue el invitado en el almuerzo-coloquio organizado por el Propeller Barcelona.
Se refirió a las últimas novedades que afectan al transporte terrestre, especialmente las que afectan al entorno empresarial al imponerse nuevas reglamentaciones y normativas por parte de la Administración pública.
“Ha habido transformaciones y cambios importantes en el sector del transporte en los últimos años, que habrá que ver cómo gestionamos de cara al futuro”, señaló Fortuny. Con la pandemia y la crisis que se produjo en el transporte marítimo, el sector de la carretera “tomó un gran protagonismo y fue una pieza clave y esencial, especialmente en las tareas de aprovisionamiento y distribución para la sociedad”. Esto “fue reconocido”, pero, una vez pasada la pandemia, “se ha iniciado un período de transformación, viniendo las reglas fijadas por la Unión Europea, tanto para el transporte internacional como para el interior”. Es así como, se han definido nuevas normas y reglamentaciones para tender “hacia un sistema más controlado y menos deslocalizado, como el control del cabotaje, el retorno de los vehículos de terceros países hacia sus países de origen, salarios mínimos, etc.”.
A nivel nacional “también se establecen nuevas leyes” cuya intención es “ordenar el sector, contribuir a su mejora, y dignificar a los profesionales, con normas como la prohibición de la carga y descarga por parte del transportista, tiempos de espera, cláusula de revisión del precio del carburante”. Posteriormente, se introducen otras normas para paliar la crisis en el sector producida por la guerra de Ucrania, con la bonificación al combustible, así como otras ayudas importantes en forma de subvenciones por vehículo o la devolución del gasóleo profesional con carácter mensual en vez de trimestral, explicó Josep Maria Fortuny.
Y, antes de finalizar el año, “también se aprueba otro Decreto Ley, el 14/2022, o la Ley de la cadena del transporte, que obliga a que el transporte se efectúe dentro del margen de su coste efectivo, llegándose incluso a sancionar a aquellos que incumplan esta cláusula”.
Otra de las reivindicaciones históricas del sector “que se ha visto reflejada en estas nuevas leyes es la regulación de la subcontratación”, junto a otros aspectos propios relacionados con la actividad en este sector.
“Todo esto y otros elementos estructurales importantes son difíciles de afrontar de forma inmediata”, indicó Fortuny, porque existen una serie de “condicionantes” como, por ejemplo, “el ambiental, dado que vamos hacia un transporte por carretera descarbonizado, y hay que ofrecer al sector herramientas y recursos para que pueda seguir este ritmo intenso y excesivamente precipitado de renovación de las flotas”.
Otros condicionantes que añaden “elementos de crisis” en la actividad son, por ejemplo “la falta de profesionales de la conducción”.
En el caso de Catalunya, también existen otros condicionantes como “la gratuidad de las autopistas, que están generado episodios de congestión en las carreteras y que, a pesar de que se han hecho propuestas de solución, no esperamos que a corto plazo se resuelva este problema y se defina un sistema o modelo de pago por el uso de las infraestructuras”.
Para terminar, el subdirector general de Ordenación del Transporte, también se refirió a otros asuntos relevantes como la Zona de Bajas Emisiones del Barcelona y su área metropolitana, una normativa también nueva “que afecta al transporte de mercancías, a la logística y a la distribución urbana” y que en estos momentos está vigente, aunque haya sido recurrida por diferentes asociaciones del sector del transporte. “Ahora se está rehaciendo, pero todos los municipios con más de 50.000 habitantes deberán desarrollar su normativa de ZBE”. A este asunto también se suma la regulación de la Distribución Urbana de Mercancías (DUM).
Y un último tema que Josep Mará Fortuny destacó por su importancia fue el de los Fondos Next Generation de la Unión Europea que, en el caso del transporte, estamos trabajando en ayudas importantes a nivel económico (22 millones de euros que se ampliarán con 29 más) destinadas a la renovación de las flotas, aunque no están teniendo el seguimiento esperado”. Y otra línea de ayudas será la que “vamos a sacar en breve dirigida a fomentar procesos de digitalización en las empresas de transporte y que será de 18 millones de euros”.
Josep María Fortuny finalizó diciendo que “hemos pasado en poco tiempo de un sector del transporte por carretera regulado en base a unos parámetros centrados en el vehículo a regulado por unos parámetros centrados en la empresa”.
"Con la pandemia y la crisis que se produjo en el transporte marítimo, el sector de la carretera tomó un gran protagonismo y fue una pieza clave y esencial, especialmente en las tareas de aprovisionamiento y distribución para la sociedad"