El martes 12 de marzo, Pablo Vilanova, director general de Mercabarna, fue el invitado en el almuerzo-coloquio organizado por el Propeller Barcelona.
Pablo Vilanova explicó que Mercabarna es una sociedad anónima, pero de capital público, en la que el Ayuntamiento de Barcelona ostenta el 51% del capital, Mercasa, empresa del SEPI que depende del Ministerio de Agricultura, el 37% y la Generalitat de Catalunya, el 12%.
Mercabarna gestiona un recinto de algo más de un kilómetro cuadrado (110.000 metros cuadrados) “en el que se localizan 600 empresas, todas ellas en la misma cadena de valor y trabajando con producto alimentario fresco y congelado, como frutas y verduras, pescado o carne”.
Según el director general de Mercabarna, “somos un clúster con una gran variedad de empresas, desde las productoras, pasando por las mayoristas, las de distribución, las del retail, las transformadoras, las logísticas o las que gestionan infraestructuras de frío, entre otras”.
Por todo ello, una de las claves del éxito de Mercabarna “son las sinergias entre empresas y la colaboración público-privada”, dado que es “una unidad alimentaria que va mucho más allá de la gestión de un recinto”.
Las 600 empresas de Mercabarna “forman un hub con el propósito de garantizar el abastecimiento alimentario de Barcelona y toda su población, además de parte de Catalunya e, incluso, un poco más allá porque da servicio a más de 10 millones de habitantes”.
Pero en Mercabarna “también es importante el nivel de exportación”, señaló Pablo Vilanova, dado que “se exporta un 35% del producto que entra”, siendo los principales mercados los países de la Unión Europea. El nivel de productos exportados ha ido creciendo exponencialmente en los últimos años gracias a que las empresas de Mercabarna han sabido ir a buscar a un tipo de cliente internacional que lo que quiere es un mix de producto, es decir, una logística de grupaje”.
Es así como una de las ventajas competitivas de Mercabarna respecto a otros Mercas o hubs de distribución es precisamente “la variedad de empresas que tenemos, contando con unas 230 que trabajan la fruta y verdura, con una gran oferta y variedad de producto que atraen al cliente internacional y que han hecho que Mercabarna sea el primer mercado de Europa de fruta y verdura”.
Otros datos que ofreció el director general de Mercabarna fueron que el 70% del producto comercializado es de origen español, del cual el 12% es de Catalunya y de proximidad, mientras que un 16% procede de otros países de la UE y un 14% es de países extracomunitarios, siendo los principales productos la banana, la piña y otros productos tropicales “que llegan en barco”, mayoritariamente.
También la ubicación de Mercabarna es un punto clave, ya que se encuentra “a 2 kilómetros del puerto de Barcelona, a 5 del aeropuerto y a 10 del centro de la ciudad”. Teniendo en cuenta que “diariamente salen de Mercabarna unos 10.000 camiones para abastecer el área metropolitana, la logística capilar es crítica y nos obliga a ser eficientes y sostenibles para ser competitivos”.
En este sentido añadió que “el músculo logístico es crítico y es muy importante tener empresas que conecten por vía terrestre o marítima, también en short sea shipping, el hub alimentario con el resto de los mercados”. Asimismo, destacó que “el ferrocarril es la asignatura pendiente”.
Antes de finalizar, Pablo Vilanova se refirió a una serie de proyectos que se están desarrollando en Mercabarna relacionados con la eficiencia energética y la sostenibilidad, destacando, por un lado, la instalación de placas fotovoltaicas en 50.000 metros cuadrados de cubiertas para el autoconsumo compartido y, por otro lado, el proyecto que se está trabajando en colaboración con el puerto de Barcelona para crear una red de distribución de frío que utilizarían las empresas de Mercabarna. Este frío se produce en la regasificación del GNL que llega por barco al puerto de Barcelona y que se transforma en las instalaciones de Enagás. “Se trata de “aprovechar una energía que actualmente se está tirando”.
Terminó mencionando dos aspectos más. Por un lado, la formación que desarrolla Mercabarna, que va desde la ocupacional, colaborando con el SOC o Barcelona Activa, hasta programas formativos específicos para las empresas y, también, desarrollando y potenciando la Formación Profesional Dual, porque “es un sector que necesita mucha mano de obra y no se encuentra”.
Por otro lado, y en relación con la necesidad de espacio para crecer, Pablo Vilanova señaló que “este ha sido uno de los hándicaps de Mercabarna desde hace 20 años”. Por esta razón, en diciembre de 2021 “compramos 170.000 metros cuadrados al Consorci de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) para que pudieran crecer las empresas ubicadas en Mercabarna, pero también para incorporar nuevas empresas”. El crecimiento será progresivo porque en este espacio “aún hay empresas industriales activas que continuarán con su actividad hasta que finalicen sus contratos de alquiler”. Posteriormente, “urbanizaremos ese espacio en el que se ubicarán empresas el sector alimentario que aporten nuevas sinergias y actividades que ahora nos faltan para hacer un ecosistema más fuerte”, concluyó el director general de Mercabarna.





