El pasado martes 14 de julio, el Propeller Club Barcelona pudo reemprender sus encuentros presenciales en el restaurante Barceloneta, aunque, en esta ocasión, sin invitado para el coloquio.
Fue un reencuentro emotivo porque llevábamos casi cuatro meses sin vernos y sin poder hablar de forma directa.
Quiero destacar que, a lo largo de estos cuatro meses, la actividad interna del Club tampoco ha cesado. La Junta Directiva se ha reunido en dos ocasiones por vía telemática, el 16 de abril y el 2 de junio, para seguir avanzando en los temas internos y de organización del Club, como los coloquios web, la búsqueda de invitados para los almuerzos-coloquio una vez se puedan reanudar los encuentros en el restaurante o la 7ª edición del Premio Propeller 2020.
También, el 9 de junio, organizamos la primera Asamblea General telemática, en la que, entre otros asuntos, pudimos debatir sobre el futuro más inmediato de nuestro Club que, aún las circunstancias adversas, mantiene el número de socios, lo cual demuestra la calidad humana y el compromiso de todos ellos con el Propeller Barcelona. Por ello, desde estas líneas, quiero agradecer el apoyo, esfuerzo y trabajo que todos han demostrado y puesto sobre la mesa.
Respecto a los coloquios, también quiero destacar la labor realizada. Hemos organizado cuatro sesiones online en la que hemos tenido invitados de renombre, como la presidenta del CEL, el consejero delegado de Bergé o el secretario general del Comité Español de la Cámara de Comercio Internacional. Otro de los coloquios web estuvo protagonizado por diversos socios del Club para analizar el teletrabajo, una modalidad que sin duda ha venido para quedarse.
Por otro lado, creo que es importante la línea de colaboración que hemos iniciado con los Propellers de Italia. Por un lado, invitaron al Propeller Barcelona a participar en el Sicily Shipping Days – The Mediterranean Challenge post Covid 19 emergency. Participamos como ponentes Eduard Rodés y yo mismo para dar nuestro punto de vista sobre la situación actual del mundo del shipping a raíz de la llegada del Covid-19.
Y quiero destacar que fuimos el único Propeller europeo invitado, lo cual nos honra y nos satisface. Por nuestra parte, creo que fue una gran experiencia y desde aquí agradecemos la cordialidad y el interés de los Propeller italianos, que también nos han invitado a participar en las reuniones mensuales que organizan los Propellers del Mediterráneo. Creo que es muy interesante abrir nuestros lazos al exterior y así lo continuaremos haciendo desde el Propeller Club de Barcelona.
Quiero pensar –y desear– que el martes 8 de septiembre podremos volver a vernos de forma presencial en el restaurante Barceloneta. De todo ello os informaremos oportunamente.
No me queda más que desearos que tengáis una buenas y merecidas vacaciones. Y, por favor, cuidaros y protegeros porque la salud es lo más importante.
Buen verano a todos!
Gonzalo Sanchís
Presidente
